Entrevista a Aurélio Edler-Copes

Camilo Irizo, director de Espacio Sonoro, entrevista al compositor Aurélio Edler-Copes.

 

Camilo Irizo.- Eres guitarrista y compositor formado entre tu país de origen, Brasil, y diversas instituciones españolas y europeas. ¿Tu propia formación refleja el espíritu actual de la música en cuanto a diversidad se refiere?

Aurélio Edler-Copes.- 
¡Creo que se podría decir que sí! (risas)

C. I.- ¿Que resaltarías de la música actual en Brasil?

A. E-C.- La música contemporánea en Brasil, en las últimas décadas, ha estado fundamentalmente circunscrita al medio académico. No obstante, creo que la situación comienza a cambiar y poco a poco empieza a haber una mayor actividad fuera de los conservatorios y universidades.

C. I.- ¿Existe un choque cultural o conceptual entre continentes o los modelos son parecidos?

A. E-C.- 
No creo que se pueda hablar de choque cultural entre la música que se hace aquí o allí. Sí es cierto que hay algunas diferencias, sobre todo respecto al modelo de enseñanza (en el continente americano la música se enseña fundamentalmente en las universidades). Se suele decir que la música en Europa está más pendiente de la tradición y que en América (me refiero al continente) tiene un rasgo más experimental.  Pero  éste es un tema bastante relativo y no se presta, creo, a generalidades. En mi caso, precisamente, he salido de mi país porque en aquel entonces la enseñanza de la composición allí me parecía demasiado académica y pendiente de las viejas vanguardias seriales y sus derivaciones. En Europa, al contrario, la veía más abierta y flexible.

C. I.- ¿Hay algo en tu lenguaje que remita a tu país?

A. E-C.- Más que a mi país, a mi cultura, que considero algo más amplio y que engloba, además de la curiosidad y los intereses personales, las experiencias acumuladas no sólo en lugar donde nací, pero también en los demás sitios donde he vivido. Pero bueno, en lo que se refiere a Brasil, a un nivel profundo, creo que le debo el deseo y la necesidad recurrente de ritmo y de pulsación en mi trabajo. Puede que en Eclipsis, para piano, (http://www.edler-copes.com/site/Eclipsis.html) incluso haya alguna reminiscencia de samba… (risas)

C. I.- Es difícil hablar de influencias en el propio estilo, pero, ¿reconoces los trazos de alguien en el tuyo?

A. E-C.– Más que compositores, hay obras que me han marcado mucho: Music for 18 musicians, de Reich, Rothko Chappell, de Feldman, Pranam II y los cuartetos de Scelsi, para dar algunos ejemplos. Pero debo tanto, o quizás más, a Malevich, Rothko, Chillida, Miró, Bill Viola; a la poesía concreta brasileña; al rock, al mantra y la música clásica hindú, al canto de Tuva, a los juegos vocales Inuits…

C. I.-¿ Como ha marcado  tu lenguaje la música electrónica?

A. E-C.- Para mi la idea viene antes de todo lo demás. Electrónico o instrumental, la concepción de un sonido tiene que venir de la imaginación. Es cierto que el surgimiento de la música electrónica ha abierto un enorme campo de posibilidades sonoras. Pero creo que el impacto ha sido mucho más grande a los compositores de entonces que a los de mi generación, que la hemos conocido e integrado desde muy jóvenes. En el caso de mi trabajo, justamente, lo que me interesa es apagar las fronteras entre lo electrónico y lo instrumental y crear un sonido híbrido, una simbiosis entre estos dos mundos. De ahí surgen las obras ‘pós-IRCAM’ Punto rosso (http://www.edler-copes.com/site/Punto_rosso.html), para cuarteto de cuerdas y electrónica en tiempo real y For Malevich, para violín, contrabajo y electrónica en tiempo real (http://www.edler-copes.com/site/For_Malevich.html).

C. I.- Conozco algún caso, como el tuyo,  de joven compositor que se integra en un ensemble como asesor artístico. ¿Que te impulsó a ello?

A. E-C.- La voluntad de trabajar con otras personas, de tocar las obras claves de nuestro tiempo, de impulsar la creación… de crear en un sentido más amplio y más cooperativo.

C. I.- Has ganado gran cantidad de concursos y obtenido becas de residencia con grupos muy importantes. ¿Qué te ha reportado todo ello?

A. E-C.- 
¡Sobre todo, mucha experiencia! Estoy muy agradecido de haber podido pasar por todas estas experiencias que me han permitido formar una base suficientemente sólida para afrontar mi trabajo actual.

C I.- Posicionarse contra los elementos actuales de falta de apoyos institucionales y del público parece más que nunca una necesidad.

A. E-C.-
Totalmente de acuerdo. Pero estoy con Pepe Mujica -presidente de Uruguay- cuando defiende que la crisis actual no es sólo económica, sino del hombre, de nuestra forma de vivir. Veo la crisis como una oportunidad para el cambio. Espero que poco a poco nos dirijamos hacia un hacer musical menos competitivo y más colaborativo, menos individualista y más cooperativista, menos dependiente de instituciones que todo lo centralizan y más ligado a estructuras flexibles y coordinadas, en la medida de lo posible, por músicos y/o artistas en activo.

C I.- Háblanos de tus próximos proyectos.

A. E-C.-Ahora mismo estoy terminando un trío para soprano, arpa y zarb que la Compagnie Éclats estrenará en el Festival Novart de Burdeos en noviembre. Luego trabajaré en una obra para arpa dos percusiones, electrónica y video en tiempo real en colaboración con el GRAME y el RIT de Lyon y finalizaré en el GMEM de Marsella el proyecto premio del New Forum Jeune Création 2012, para voz, ensemble, video y electrónica en tiempo real que será estrenado por el Ensemble Mosaik en el Festival Ultrashall de Berlin y en la Biennale Musiques en Scène de Lyon. Enseguida hay un cuarteto de guitarras, encargo de la Fundación BBVA, que se estrena en el Ciclo de Música Contemporánea del BBVA-Bilbao, y la finalización de una obra para viola d’amore y electrónica, encargo de M()A Project. Estas son las obras que me habitan desde hace un buen tiempo y con las que estaré en los próximos meses… Pero bueno, ideas y proyectos no faltan, lo suyo es conseguir las buenas condiciones para poder desarrollarlos y luego… ¡darlo todo y hacer un buen trabajo! (risas)